
CAMINO ENTRE REJAS
La prisión atrapa al individuo errante y olvida sus derechos fundamentales bajo la severidad de la ley. No repara en descomponerle al saber que el poder le asiste. Custodia y deshumaniza, castiga y reprime, oculta y asecha. En lugar de construir procesos de reparación, las vidas recluidas se apagan en la oscuridad de las prisiones colombianas.